Que en Suiza se confirme la sentencia contra Spericen.

Ahora resulta que Suiza tiene un sistema judicial amañado que condena inocentes y Guatemala, tribunales independientes de los poderes fácticos que no se dejan influenciar a la hora de dictar sentencia, y esa es la diferencia entre Sperisen y Giamattei. ¡Qué derroche de creatividad para retorcer la realidad y de desfachatez para defender lo indefendible! Solo falta que pidan que el tribunal de honor del Cang suspenda de sus funciones a los jueces suizos.